La misión del educador.

1369

Hace siete años, automatizaron mis estudiantes de Conalep León 1, grupo 408, un tambor industrial utilizando Arduino.

Lo increíble de todo esto, radica, en que los muchachos no sabían, ni conocían la tarjeta Arduino, mucho menos su funcionamiento, y peor aún programarla.

Un estudiante, Mario Solorio, joven dedicado, serio, estudioso, se acercó al terminar la clase “Diagnóstico de fallas en sistemas electromecánicos”, y me dijo – “Profesor, me interesa el proyecto”, a lo cual le agradecí, comenzando una aventura del pensamiento, descubrimiento y construcción.

En pocas semanas, fueron dos, tres, cuatro, y más estudiantes que se fueron acercando al proyecto. Nos tacharon de locos, con frases tales “Ojalá funcione”, “ni saben leer y van a automatizar”, o peor, un Profesor se me acercó a desalentarme con una frase que me molestó; “el poner metas muy altas, las cuales no funcionen, puede ser desalentador, matando las ilusiones de estos muchachos”.

Con lo anterior, nos dedicamos a armar el plan de trabajo, refacciones, y dividir tareas; para entonces ya era el salón completo, donde unos arreglaban el motor, otros el circuito eléctrico, soldaban, programaban, y pocos pintaban la estructura.

Todo se volvió realidad, se presentó ante la prensa, a los demás grupos, en donde estos estudiantes dieron un brinco cuántico en conocimientos, y en su forma de pensar cambio bajo un proceso termodinámico del corazón y del cerebro.

En octubre del 2016, se repetió la misma hazaña, al automatizar el tambor industrial, con sensores y una señal de alerta vía celular.

Nuestro viejo y querido tambor, vuelve a ser la estrella central, con un grupo de estudiantes, no brillantes, ni estudiosos, sino aquellos que necesitan un “empujón” en su carrera técnica, los que buscan una oportunidad y no se les ha dado; una lección a aprender muy difícil bajo un esquema de aprendizaje veloz para entregar en 4 semanas, un regalo de cumpleaños, en este caso el mío; donde se logró, volvió a brillar, ahora con 5 estudiantes entregados, dedididos con “ganas de triunfar”, el tambor y el Genio Mario Solorio quien aceptó a colaborar.

El escenario fue en la “Oimpiada del Conocimiento que organizó el buen Lic. Jesús Fuentes del Cast Conalep Guanajuato, quien a nivel estado los 16 planteles participaron con sus proyectos; de a dos proyectos por Institución serían 32.

Teniendo como sede el Centro de Ciencias Explora, los pasillos fueron ocupados por los proyectos, distribuyéndose alrededor; uno a uno el comité de jueces evaluadores pasaron a realizar una serie de preguntas a los jóvenes, esto sería la primera ronda para comenzar a seleccionar a quienes pasarían a la ronda final. Solamente 10 de los 32 fueron aprobados.

En la segunda ronda, los estudiantes tenían 7 minutos para explicar, sin embargo, de el tiempo indicado, 2 minutos eran para el docente que podía participar y aclarar algunos aspectos clave. La espera fue muy tensa, los cuestionamientos cada vez eran muy precisos en detalles del proyecto; estudiantes que cerraban la escucha y respondían sin poner atención a la pregunta, y esto restaba puntaje.

Toca a estos jóvenes (Carlos Ramírez, Hilario Zúñiga, Diego Alonso López, Luis Arturo Romero Fuentes, y José Ramiro Ruiz Torres), electromecánicos y estudiantes del Modelo Mexicano de Formación Dual del Conalep León 1, quienes explicaron desde la idea, desarrollo e innovación, al principio nerviosos, pero conforme pasaba el tiempo, se fueron centrando en responder cada custionamiento.

Hicieron un Excelente papel, se les otorgó el primer lugar a nivel estatal por el proyecto, con un aprendizaje para toda la vida; hoy ya son profesionistas, siempre se les recuerda con mucho orgulo y cariño.

Esta es la misión de todo educador, darle juego y saber que juego debe jugar cada estudiante, a su nivel, profundidad de conocimientos; un reto disfrazado de oportunidad, un trampolín disfrazado de escalón.

Un método para educar, vuelto a poner en práctica, para formar a una persona, futuro profesionista, papá y ciudadano.

Una oportunidad para transformar mentes, acciones, conocimientos, habilidades y actitudes.

Un reto a vencer.

¿Cuál es su misión como educador?

Publicidad